Cuando hablamos de los componentes de un PC, uno de los más cruciales es la unidad de almacenamiento. Sí, es cierto que no es el único ni el más costoso, ya que puede reemplazarse con relativa facilidad, pero desempeña un papel vital al ser el hogar de nuestra información más valiosa. Imagina perder esos documentos importantes, fotos familiares o proyectos en los que has trabajado con dedicación. Sin una copia de seguridad, la posibilidad de recuperarlos es, en el mejor de los casos, muy reducida.
A pesar de su relevancia, muchos usuarios forman hábitos que comprometen la salud de su disco duro, acortando su vida útil de forma alarmante. Si quieres asegurarte de que tu unidad de almacenamiento funcione de manera óptima lo más tiempo posible, aquí te comparto algunos hábitos que debes evitar a toda costa.
Ten cuidado con la temperatura
Usar un PC o un portátil en ambientes calurosos no solo obliga a los ventiladores a trabajar a máxima velocidad para enfriar el procesador, también puede afectar drásticamente a las unidades de almacenamiento. En la mayoría de los casos, estas unidades no cuentan con un sistema de disipación adecuado, exceptuando algunos modelos más avanzados. Además, el polvo y la suciedad que se acumulan en el interior del equipo pueden obstruir las rejillas de ventilación, elevando aún más la temperatura interna.
Recuerda que la temperatura máxima segura para la mayoría de los discos duros no debe superar los 50 grados Celsius. Para monitorear la temperatura de tu unidad, puedes utilizar aplicaciones como CrystalDiskInfo, una herramienta gratuita que te ayudará a mantener un ojo en la salud de tu disco duro.
Monitorea la salud del disco duro
Si notas que tu disco duro actúa de manera errática, con cambios inesperados en la velocidad de transferencia o escritura de datos, es una señal de alarma. Podría estar más cerca del final de su vida útil de lo que imaginas, o quizás esté sufriendo por un problema de calor. De nuevo, CrystalDiskInfo es tu mejor aliado aquí; podrás no solo ver la temperatura, sino también el estado general de tu unidad.
Evita moverte con el ordenador mientras está en uso
Si necesitas trasladarte para mostrar algo en tu portátil, lo mejor es cerrar la tapa. Hacerlo ayuda a proteger el cabezal del disco duro (HDD) de movimientos bruscos que podrían dañarlo. En el caso de las unidades de estado sólido (SSD), que no tienen partes móviles, puedes moverte sin preocupaciones, aunque siempre es mejor prevenir.
No llenes el disco duro a su máxima capacidad
Los sistemas operativos como Windows requieren espacio libre para funcionar correctamente. Si tu disco duro se queda sin espacio, no solo verás que el rendimiento se reduce, sino que las operaciones de lectura y escritura aumentan, lo que provoca un desgaste acelerado. Intenta mantener al menos entre 20 y 30 GB de espacio libre para que tu sistema tenga margen para operar eficientemente.
Apaga el equipo correctamente
Puede que estés en un apuro y pienses que mantener presionado el botón de encendido es la forma más rápida de apagar el equipo. Pero este método puede interrumpir cualquier proceso que se esté realizando en el disco y crear sectores defectuosos, especialmente en los discos HDD. La paciencia es clave: siempre apaga el computador a través del menú de inicio de Windows para asegurar un cierre limpio y seguro.
Al tomar estos pasos, no solo mejorarás la vida útil de tu unidad de almacenamiento, sino que también protegerás tus datos valiosos. La tecnología es increíble, pero cuidarla es la mejor manera de garantizar que siga funcionando para ti a largo plazo.