Una de las mayores preocupaciones que tienen los usuarios al adquirir un nuevo PC es la durabilidad de sus componentes.
Cada parte del equipo tiene una vida útil que depende de los materiales utilizados en su fabricación, pero la verdadera resistencia se pone a prueba ante imprevistos. Un golpe fuerte o una caída pueden ser críticos.
Si bien muchas personas no consideran que su ordenador pueda tener un accidente, situaciones cotidianas como un tropiezo que lo haga caer de una mesa o un mal transporte pueden ser más comunes de lo que pensamos.
La amenaza silenciosa para tu ordenador
Cuando se trata de dañar un ordenador, no solo existen problemas técnicos relacionados con voltajes altos o configuraciones inadecuadas, sino que los impactos físicos son también una amenaza significativa. Por ejemplo, podrías preguntarte qué sucede si tu PC sufre una caída desde una altura considerable.
Aquí es donde se torna interesante hablar sobre la resistencia de los diferentes componentes.
¿Qué componentes de tu PC son los más vulnerables en las caídas?
Las cajas de los ordenadores suelen ser robustas, diseñadas para ofrecer cierta protección ante golpes. Sin embargo, el resultado de un impacto dependerá de la fuerza con que este se produzca.
Imagínate una caída desde una altura de 5 metros versus una de 30 cm; la diferencia en daños potenciales es abismal. Si consideramos la peor situación, es probable que algunos componentes sean más susceptibles a daños.
La tarjeta gráfica es, sin duda, una de las primeras piezas que nos viene a la mente en este contexto. Su tamaño y complejidad hacen que sea particularmente vulnerable.
¡Daños específicos!
Podría romperse el conector PCIe, doblarse o incluso dañar la placa al recibir un fuerte impacto. A menudo, esto resulta en que la gráfica dedicada no sobrevive a la caída.
Luego están los disipadores, ya sean de aire o AIO. Estos pueden absorber una parte del impacto, pero si el sistema de refrigeración líquida se rompe, deberías reemplazarlo por completo.
En el caso de los disipadores de aire, siempre que no se dañen los heatpipes, es posible que solo necesites cambiar los ventiladores.
Componentes que resisten las caidas
La placa base es otro de los componentes críticos. Puede sufrir daños severos dependiendo de cómo y dónde haya recibido el impacto. En algunos casos, una ligera curvatura es todo lo que queda.
Sin embargo, las ranuras, como la de la tarjeta gráfica, son especialmente vulnerables y podrían llegar a romperse.
Ahora, quizás te estés preguntando cuáles componentes podrían salir ilesos de una caída fuerte.
¡Protege tu inversión!
Sorprendentemente, los más pequeños y protegidos tienen más posibilidades de sobrevivir. Por ejemplo, los SSD M.2 y los procesadores suelen estar en una posición favorable tras un golpe. Generalmente, el disipador los protege, y el procesador, a menos que se fracture o se doble un pin, debería seguir funcionando perfectamente.
La fuente de alimentación también podría sobrevivir, siempre y cuando sus condensadores no se rompan, aunque su ventilador podría dejar de funcionar.
Finalmente, la RAM es más robusta de lo que parece. Su ligereza y la protección que le ofrecen las ranuras reducen el riesgo de daño. Si no se ha doblado, es probable que continúe operando sin problemas.
Identificar la durabilidad de los componentes y comprender cómo reaccionan ante golpes y caídas es fundamental al invertir en un ordenador.
Tener un conocimiento más profundo sobre cómo cuidarlo y qué hacer en caso de un accidente puede marcar la diferencia entre salvar tu información o enfrentarte a una tragedia tecnológica.