Si bien Windows 10 tiene una fecha de caducidad, eso no significa que tengas que apresurarte a cambiar de sistema operativo o a comprar un nuevo ordenador. Aunque Microsoft dejará de ofrecer soporte gratuito en octubre de 2025, la decisión de actualizar a Windows 11 dependerá principalmente de tus necesidades personales y profesionales.
Entendiendo el contexto de Windows 10
Hoy en día, Windows 10 continúa siendo un sistema operativo estable y funcional, utilizado tanto por individuos como por pequeñas empresas para trabajar, estudiar o simplemente disfrutar de su tiempo libre. Sin embargo, es importante tener presente que, a partir de octubre de 2025, el soporte oficial terminará.
Esto significa que solo recibirás actualizaciones de seguridad si decides contratar el plan ESU (Extended Security Updates), un modelo que ya se implementó en versiones anteriores como Windows 7.
El Riesgo de Usar Windows 10 sin Soporte en Entornos Críticos
Esto resulta especialmente relevante si usas tu PC en entornos donde la seguridad es una prioridad. Sin parches oficiales, cualquier vulnerabilidad se convierte en un riesgo real. Así que, aunque Windows 10 continúe funcionando adecuadamente, el tiempo puede jugar en contra si no estás al tanto de las vulnerabilidades emergentes.
En muchos negocios pequeños, por ejemplo, es común ver sistemas POS o cajas registradoras que aún utilizan Windows 10, ya que siguen cumpliendo con su función sin inconvenientes. En estos casos, pagar por el soporte extendido podría ser más económico que renovar completamente el sistema.
¿Merece la pena pagar por el soporte extendido de Windows 10?
La respuesta a esta pregunta realmente depende de cómo utilices tu ordenador. Si eres una persona que trabaja con datos sensibles, realiza operaciones bancarias en línea o gestiona información empresarial importante, considerar el soporte extendido puede ser una decisión sabia, al menos por un tiempo.
Sin embargo, si tu uso se limita a actividades más casuales como navegar por internet, utilizar redes sociales o ver series y tienes algunos conocimientos básicos de seguridad, podrías estirar un poco más la vida de Windows 10 sin grandes riesgos, aunque la posibilidad de enfrentar ciberamenazas siempre estará presente.
Windows 11: una mejora que no convence a todos
Desde su lanzamiento en 2021, Windows 11 ha recibido varias actualizaciones que han corregido muchos de sus errores iniciales. Consume menos recursos, cuenta con un diseño más fluido y ha mejorado considerablemente su rendimiento en equipos compatibles. Sin embargo, la recepción ha sido mixta.
Algunos usuarios lo consideran como un “Windows 10 con íconos centrados”. A pesar de las mejoras en la interfaz, no siempre ofrece ventajas funcionales significativas, especialmente para aquellos que provienen de un sistema que ya funciona de manera óptima.
Si no sientes ninguna necesidad urgente de actualizar o si no te atrae alguna función específica de Windows 11, es perfectamente razonable esperar.
¿Y qué pasa si motivo la espera por Windows 12?
Se rumorea que Windows 12 podría lanzarse a finales de 2025, centrando su atención en la inteligencia artificial y en funciones que sólo funcionarán con hardware de última generación. Por lo tanto, si tu ordenador actual tiene dificultades para ejecutar Windows 11, es probable que tampoco sea compatible con Windows 12. Esta es una consideración clave para que tomes una decisión informada.
Si tu PC está quedándose atrás, podría no ser sensato invertir en un sistema que no podrás aprovechar al máximo. En ese caso, planificar una renovación completa para 2025 podría ser la mejor opción, momento en el cual podrías comprar un nuevo ordenador para adaptarte a las nuevas tecnologías.
La importancia de esperar
Actualizar por obligación no siempre es la mejor solución. Si tu equipo está trabajando bien con Windows 10 y no ves grandes beneficios en Windows 11, esperar podría ser la opción más adecuada. No obstante, debes tener en cuenta el costo del soporte o los riesgos asociados a funcionar sin él una vez que llegue 2025.
Windows 12 promete ser un sistema mucho más ambicioso, preparado para aprovechar al máximo la inteligencia artificial. Por ello, para muchos usuarios, lo más sensato será continuar con Windows 10 un poco más y hacer la transición en el momento adecuado. Esto te permitirá no solo estar al día con la tecnología, sino también asegurarte de que tu inversión tenga un verdadero retorno.